lunes, 14 de marzo de 2011

MIS APRENDIZAJES SOBRE EL TSUNAMI EN JAPON, Y CONSECUENCIAS

Estamos viviendo una catástrofe impresionante, en Japón. No puedo evitar imaginarme el día antes de toda esa gente que hoy ya no está, ajenos al día después, haciendo sus vidas, tan normalmente como tú y como yo. ¡ Cuanto lo siento!. No sé si es síntoma de los años, o de que poco a poco voy desenterrando la capacidad innata de los humanos con respecto a la empatía (neuronas espejo, ya sabéis), pero me surge automático el intentar ponerme en su lugar.

¿En qué se diferencia esta catástrofe de otras? Pues la principal diferencia desde mi punto de vista, es que ha ocurrido en el primer mundo, en el mundo desarrollado, a gente como tú y como yo (porque parece que es bastante humano sentirse más cercano a aquellos que, por diferentes motivos, se parecen mas a nosotros. De ahí nuestra indiferencia a que se hunda un ferry con 200 personas de la zona en un lago africano, y en cambio la importancia que le damos a que pueda haber un ahogado en el estanque del retiro, o el accidente de un velero de unos europeos, donde iban 4).